Cuenta la historia que mientras el ejercito regresaba a Cotui, lugar donde tenían su campamento, uno de sus soldados (Sebastián Alcántara) se detuvo en Bayaguana y conoció a la señorita Ciriaca Cordero, con quien empezó un noviazgo. Llegado el momento del matrimonio, el señor Isaías Cordero, padre de la novia, le regaló a la pareja un hato de tierra que este le compró al gobernador de la isla, Dr. José Núñez de Cáceres. Dicho terreno tenia los siguientes linderos: al Oeste el Río Ozama; al Este Arroyo Bermejo; al Norte la Loma de los Cumanices y el arroyo Canta Maco: al Sur el Río Ozama.
Don Juan nace como fruto del matrimonio de Sebastián Alcántara, oriundo de San Juan de la Maguana, un soldado del ejercito del general Juan Sánchez Ramírez, y Ciriaca Cordero, oriunda de Bayaguana. Esto ocurrió entre los años 1808 al 1810, tras la batalla de Palo Hincado que libró el general Juan Sánchez Ramírez contra los Ingleses, en el Seibo, el 7 de Noviembre del 1808.
Allí procrearon 7 hijos (6 varones y 1 hembra) y tres de ellos se establecieron dentro de los terrenos de sus padres. Uno de ellos fundó en Manga, llamado así porque la crecida del Río Ozama arremangaba el arroyo de la Caraguana, y hacia un atajo, que traducido al lenguaje coloquial se la llama Manga. Otro hijo se estableció en lo que hoy llamamos los galanos, llamado así pues sus hijos tenían los ojos color verde alagartados o galanos.
El tercero, Juan Alcántara fundó en Frías. Ya que vivía próximo al camino real, era solicitado por los transeúntes del Cibao hacia Santo Domingo, para que le dieran posada en su casa.
Luego de un tiempo él decidió crear un ambiente para dar posada, lo que poco a poco se convirtió en una especie de negocio. Luego de haber producido algo de dinero, Alcántara compró el titulo de Don al estado Dominicano, que para esa fecha costaba RD$10.00 pesos. Ya con este titulo en mano, los transeúntes al comunicarse en los lugares de salida, programaban su posada en Don Juan. Es así como nace el nombre, cual se estima se popularizó en los alrededores del año 1850.
Luego de un tiempo él decidió crear un ambiente para dar posada, lo que poco a poco se convirtió en una especie de negocio. Luego de haber producido algo de dinero, Alcántara compró el titulo de Don al estado Dominicano, que para esa fecha costaba RD$10.00 pesos. Ya con este titulo en mano, los transeúntes al comunicarse en los lugares de salida, programaban su posada en Don Juan. Es así como nace el nombre, cual se estima se popularizó en los alrededores del año 1850.